lunes, 21 de abril de 2008

DE SEPULVEDA AL DURATON

Al principio dudamos. El día no acompañaba mucho. Pero la decisión estaba tomada. Recordamos lo de "se sale aunque haga bueno". El viaje con lluvia y niebla, pero el deseo de salir a por la Reconquista hizo que ni la lluvia, el viento y el frío lo impidieran.

Comimos tempranamente en un Figon muy agradable y acogedor. El cordero no nos falló. La sobremesa nos acompañó con unos chupitos cortesía de la casa. Tras el café nos dirigimos camino de las impresionantes Hoces del Duratón. No hacía mucho que las habíamos visto pero nos volvieron a impresionar. Recorrimos una parte de la cornisa en la que se se eregía solitaria la Puerta de la Fuerza, una de la puertas de la antigua muralla de Sepúlveda de origen medieval que reina en los cortados de las Hoces.












Seguimos avanzando atentos no solo al majestuoso vuelo de algunas águilas sino al maravilloso espectaculo que la naturaleza nos estaba ofreciendo. La fuerza del viento nos impidió continuar y tuvimos que dar la vuelta. El regreso lo hicimos por la misma cornisa (protegida casi todo el camino por una valla de maderas) pero esta vez la mirada se centraba más en las montañas que se divisaban al fondo, La Pinilla.
El paisaje era curioso a la vez que espectacular y relajante. Las nubes oscuras y grises dejaban atravesar algunos rayos de sol que casualmente incidian en las montañas recien nevadas. Bonito espectaculo. Ya de nuevo en Sepúlveda decidimos tomarnos un cafetito en Riaza, hacía mucho que no ibamos por allí. Dejó de llover justo cuando debía de hacerlo. Fue un gran dia.

domingo, 13 de abril de 2008

AL YELMO POR LA SUR (vía Ignatius)

No me lo creía. El olor de los latidos me delataban. No podía ocultar más las emociones. Lo decidimos el miércoles y durante el jueves, el viernes y el sábado no deje de pensar en ello. Llegamos a las 8 y media. Desayunamos fuerte en el bar del tío penas y sin esperar un minuto más fuimos al encuentro de bolelbilobi. Subimos sin demorarnos mas. El objetivo propuesto por kiba, y al que acepté, no sin alguna duda, era subir al Yelmo por la vía Ignatius. Antes de llegar nos recreamos en una de las zonas más bonitas y sorprendentes de la Pedriza, la Lagunilla secreta cercana al Yelmo. Después, aparece, señorial, respetuoso, majestuoso, ...el Yelmo.
Nos aproximamos a la vía elegida: la Ignatius De lejos no se aprecia claramente, pero conforme te vas acercando no deja de sorprender al fabuloso grado de inclinación de sus paredes. Ya no hay marcha atrás. Todo está en su sitio. La preparación física y sobre todo la psicológica no pueden fallar. Dejamos que kiba decida y planifique. Bolelbilobi viene de hacer 7a en Patones y quiere amigarse con la adherencia. A mi por lo que cuentan creo que no me gusta Patones. Es muy deportivo. Prefiero la clásica, aunque no lo descarto. En fin, todo está decidido. Kiba de primero, yo de segundo y cierra bolel. Comenzamos con un murito muy vertical que salvamos no sin alguna dificultad. Es muy cortito, para abrir boca (lo gradúan como IV pero a mi me parece más).
El segundo largo, un V, muy vertical y de chapas alejadas, pero también lo superamos. No hubo más remedio que confiar en los gatos desde el primer momento. El tercer largo fue especial, es V+, y las chapas se alejan más de la cuenta. La tensión nos silencia. El pie izquierdo de kiba empieza a temblar. Aferro la cuerda con todas mis fuerzas y me preparo para el pire. Kiba ha subido demasiado y la chapa le queda por debajo. De nuevo la moto. Solo puede rezar y confiar en los gatos. En palabras de kiba: "...se borra la sonrisa y me concentro, cojo aire y salgo por una vía evidente pero veo que a la mitad se borra, estudio los posibles, no me gusta ninguno, avanzo por la vía a ver que hay mas adelante y sigue sin gustarme. Demasiado liso, no veo puntos para manos por ningún sitio (olvidas que estas en adherencia) hay un paso largo que abriéndote bien de piernas lo podrías sacar, pero a esa altura y sin ningún punto de agarre decente me parece muy arriesgado. Opto por subir, los pies van encontrando puntos de apoyo y avanzas pasito a pasito. De repente, giro la cabeza y veo que he subido demasiado, la reunión esta debajo y muy a la derecha todavía, te quedas bloqueado y piensas (cojonudo, lo mejor que me podía pasar). Miras hacia arriba ves un tensor de otra vía y estudias si es posible sacarla por ahí, pero el tensor esta mas lejos todavía que la reunión, ( si me piro en esta vaya peazo vuelo que voy a dar) Miras lo que vas arrastrando de cuerda, 9 metros o mas, lo estudias todo de nuevo calculando no sabes que, y la pierna te da un segundo aviso, te sobreviene la moto, y en que punto. Nervioso empiezan a saltar las alarmas y lo primero que haces es coger aire, hay que estar tranquilo, menos mal que el temblor es mas suave que el primero, buscas rápidamente una salida con garantía y ves las mismas dudas en todas. El temblor empieza a ser más latente y oyes unas voces a tu derecha. Consejos que estaban dando en la cordada de La Walkiria, (las manos ahí no te servirán de nada, haz fuerza con los pies). Tuvieron gritos, voces y hasta un escandalo particular, pero esa éfrase me sonó a ángel de la guarda. Lancé otro pasito de fe hacia arriba, sabiendo que no aguantaría, y, milagro, los gatos funcionaron de nuevo. Bien, ahora tocar bajar. Un, dos, tres pasitos, despacio, los gatos trabajan estupendamente, en alguno notas un granillo de roca o arena que se desplaza con tu apoyo de pie, te limpias la suela contra la pernera de la pierna y vuelves, ahora esta limpio, ahora apoyo perfectamente y funciona. De repente una minúscula repisa de color oscuro resalta a tus ojos. Son 5 cm de un saliente casi minúsculo que en ese sitio es todo un balcón. Apoyas la puntera y suspiras, y esta vez si que suspiré. En ese momento supe que podría sacar el siguiente paso. Busqué un agarre en el que pinzar con dos dedos con la mano derecha y abrí las piernas para pisar encima del tensor. Lo logré. Fue el apoyo mas estable que tuve en toda la travesía. Chapar y pasar cuerda en esa posición fue una ejercicio de flexibilidad y equilibrio..."
Ya solo nos quedaban dos largos más. En el cuarto también tuvimos anécdotas. Nos desviamos un poco hacia la Walkiria, aunque corregimos el error al momento. Necesitamos un friend de los compañeros de vía.
El último largo dudé un solo segundo en hacerlo de primero. La tentación era grande pero el respeto y la cordura me vencieron en beneficio de bolelbilobi. Otra vez será.

Conseguimos la última reunión sin problemas aunque el arbolito más bien podría haberse confundido con el "olmo viejo, hendido por el rayo y en su mitad podrido" que diría Machado.
Coronamos la vía y la satisfacción nos invadió. Fue un día en el que e
l tiempo nos acompañó y la compañía ... aun mejor.

Por cierto le he compuesto un tema. Aquí lo tenéis:

http://es.youtube.com/watch?v=HW5F0YP_M0E